Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. À Punt revoluciona la parrilla de su radio a media curso. Pròxima parada, programa decano de la cadena pública (solo menos longevo que Territori Sonor), se despedirá de la audiencia el próximo 8 de marzo, viernes. Así lo anunció ayer su presentadora, Susanna Lliberós, en redes sociales y han confirmado fuentes oficiales a Culturplaza.
El magacín de tarde ha estado en antena desde octubre de 2018 y ha sido el único que no había sufrido cambios drásticos en su horario ni en su formato. Es también uno de los pocos grandes formatos que siguen externalizados, dentro de la programación de la radio pública.
El programa que le sustituirá será Podríem fer-ho millor, que hasta ahora se emitía durante las mañanas del fin de semana con un equipo liderado por Susa Calafat. A partir de ahora, será este magacín el que adquiera carácter diario, si bien ya lo ha hecho en diferentes periodos estivales para reemplazar parte de la programación propia de À Punt en las mañanas. En esta transformación, el equipo de Podríem fer-ho millor también ha reducido su plantilla.
En esta carambola, las mañanas del fin de semana tampoco se quedarán vacías. À Punt también pondrá en su lugar Territori Fòrmula, un programa bajo el paraguas de la marca Territori Sonor.
À Punt publicó el pasado mes de octubre una convocatoria de "Necesidades de producción" para los primeros meses de 2024, en la que se buscaba “un magacín diario de entre tres y cuatro horas de duración”. La radiotelevisión confirmó entonces que estaba explorando la opción de “reforzar” sus tardes. Sin embargo, la cancelación no ha venido aparejada a un nuevo formato, sino a una reubicación de los ya existentes.
Sobre las causas de esta cancelación sobrevuelan dos factores. Primero, la audiencia; segundo, los ajustes presupuestarios que está llevando a cabo toda la radiotelevisión. Sobre lo primero, el propio Alfred Costa, director general de À Punt, cuestionó en una entrevista reciente la solvencia de los datos del EGM, que en el caso de la radio valenciana, oscila de manera más que notable: "El resultado es que en primavera me da un pico de audiencia y en otoño un valle, a pesar de tener la misma programación y las mismas voces. Entonces, en los momentos de bajada, ¿cambiamos la programación? Porque para cambiar la programación tienes que exponer por qué necesitas hacerlo".
Repreguntado entonces en base a qué se había decidido la búsqueda de un programa que sustituyera a Pròxima parada, dijo: "Te invito a que subas a la octava planta [en la que se reúne el Consell Rector] y hagas esa pregunta. Es decir, por qué en programas que se entienden de servicio público no pesa tanto el dato numérico sino la labor social, cultura y patrimonial, y en otros no".
En el anuncio de la cancelación de Pròxima parada por parte de Susanna Lliberós, ha querido reivindicar la labor de los "más de 1.200 programas". "Cada uno de los miembros del equipo, desde la primera temporada hasta la última, hemos trabajado para realizar un programa de proximidad, vertebrador, que ha basado sus fundamentos en un inmenso amor por la lengua, en el respeto infinito a la audiencia, en hacer visibles a los invisibles, en estar siempre al lado de las causas justas, en ponerle humor a la vida y en dar el espacio justo al grandísimo talento artístico y cultural que hay en nuestro país. Sólo puedo sentir un profundo agradecimiento por haber podido ser una pequeña parte de todo este engranaje"
