VALÈNCIA, (EFE). La exdirectora del IVAM Consuelo Císcar y su hijo, el escultor 'Rablaci', presentaron a la jueza que les investiga por malversación el parte de visitas a la prisión de Picassent, donde cumple condena el exconseller Rafael Blasco -marido de ella y padre de él-, para defender su arraigo y rebatir el riesgo de fuga.
Según consta en un auto del juzgado de Instrucción número 21 de València, la instructora ha decretado para ambos la libertad condicional, la retirada del pasaporte y la prohibición de abandonar el espacio Schengen por riesgo de fuga. Esta resolución se adoptó en una vista celebrada el pasado miércoles y a petición de la Fiscalía y la Abogacía de la Generalitat, debido a que ambos se enfrentan a una pena de prisión de hasta ocho años por un supuesto delito continuado de malversación.
El Ministerio Público sostiene que Císcar, en el ejercicio de su cargo como directora del IVAM, utilizó dinero público para promocionar la carrera de su hijo Rafael Blasco Císcar 'Rablaci' y puso a su servicio la estructura administrativa del IVAM con este mismo fin. Esto lo considera "meridianamente acreditado" en varios correos electrónicos en los que se "constata el conocimiento y colaboración en esta actividad" -que se desarrolló tanto en España como en el extranjero- por parte de 'Rablaci'.
Estos hechos se añaden a los previamente constatados por Fiscalía en la instrucción, como son el supuesto sobrecoste en la adquisición de obras de arte por parte del IVAM y otras presuntas irregularidades en el servicio de publicaciones.
El Ministerio Público alega que "uno de los elementos necesarios para la adopción de la medida cautelar interesada es la intensa actividad internacional desarrollada en el marco de la actividad delictiva por parte de los dos investigados". Ello les ha "granjeado una multitud de contactos a nivel internacional que les pudiera facilitar una fuga y, por lo tanto, la posibilidad de sustraerse a la acción de la justicia", añade.
La Abogacía de la Generalitat apoyó estas tesis y reclamó igualmente la retirada del pasaporte, atendiendo además a la "capacidad económica de ambos investigados".
La abogada de Rafael Blasco Císcar se opuso a las medidas cautelares solicitadas al considerar que no existen en el sumario indicios suficientes para dirigir la investigación contra él, que actualmente está preparando una tesis, que lleva más de año y medio con problemas de ansiedad, que carece de medios económicos propios, tiene arraigo social, no tiene antecedentes penales y ha colaborado con la UDEF cuando ha sido requerido.
Como sustento documental de todo lo anterior, la letrada aportó un informe médico, certificado de su situación como autónomo, certificado de estudios y el parte de visitas a su padre en la cárcel de Picassent.
Igualmente, el letrado de Consuelo Císcar expuso que su defendida no tiene antecedentes policiales ni penales, que no tiene causas pendientes y tiene un evidente arraigo en Valencia, ya que ha visitado en múltiples ocasiones a su marido.
La jueza entendió evidente el arraigo de ambos en Valencia pero también vio "razonable e inevitable" considerar la existencia del riesgo de fuga, dado que "ambos cuentan con múltiples contactos fuera del territorio Schengen que les podrían servir de ayuda para eludir la acción de la justicia".
Los magistrados concluyen que las obras del citado escultor vendidas al museo eran "auténticas" y el precio que se pagó por ellas "fue acertado o en su caso muy beneficioso"
