El portavoz del grupo municipal socialista, José Manuel Prieto. Foto: ÁLEZ OLTRALa mercantil perdona 96 millones al Ayuntamiento de Gandia a cambio de que le devuelva los 55 millones del canon del agua que adelantó cuando José Manuel Orengo era el alcalde y cuyos fondos no se utilizaron
GANDIA. El gobierno de Gandia pone punto y final a la problemática que arrastra con Aguas de Valencia a través de un acuerdo por el cual la mercantil perdona los 96 millones de euros que el Ayuntamiento adeuda por la gestión de los servicios de agua potable y el alcantarillado del municipio. A cambio, el gobierno devolverá los 55 millones de euros del canon del agua que la empresa adelantó cuando José Manuel Orengo era el alcalde de la ciudad y cuyos fondos no se utilizaron para inversiones en infraestructuras hídricas.
Aprobado en la Junta de Gobierno realizada esta mañana, el pacto deja sin efecto el acuerdo adoptado en la legislatura pasada por el Partido Popular, que reconoció una deuda de 96 millones de euros a la empresa concesionaria del servicio de agua potable cuando rescindió el contrato con la misma.
El acuerdo, que ha salido con los votos a favor de los 4 miembros del PSOE y el de Esquerra Unida y los votos en contra de los tres miembros de Més Gandia, establece también restablecer el contrato adoptado en 2008 con Aguas de Valencia para que ésta siga prestando el servicio de agua potable. A cambio, el Gobierno de Gandia reconoce que durante la gestión realizada por el Partido Popular en esta materia, Aguas de Valencia ha perdido 4’7 millones de euros. Dicha cantidad se podrá devolver al final de la concesión (en el año 2033).
Según ha recalcado el portavoz del grupo municipal socialista, José Manuel Prieto, este convenio no afectará a los bolsillos de la ciudadania pues el gobierno ha acordado rebajar la tarifa del alcantarillado para evitar una subida en el precio del recibo del agua. “Hemos logrado solucionar el problema sin perjudicar a la ciudadanía”, ha enfatizado.
Sin obviar que la problemática del agua se remonta a principios de 2008, el edil socialista ha señalado que se puede criticar que el gobierno decidiera usar el canon del agua en otros proyectos pero ha recalcado que ya se han juzgado democráticamente con dos elecciones municipales y que “el gobierno actual tiene la obligación de gestionar el presente y solucionar los problemas que afecten a la ciudadania y hoy hemos dado respuesta a un problema que ponía en riesgo el futuro de la ciudad”.
Por su parte, el concejal de Esquerra Unida, Nahuel González, ha explicado que tras el sometimiento de este asunto a votación en la asamblea de Esquerra Unida, se acordó “por responsabilidad” apoyar el acuerdo adoptado con Aguas de Valencia. Igualmente, ha resaltado que la rebaja de la tarifa del alcantarillado para que el pago de la deuda a Aguas de Valencia no repercutiera en los ciudadanos fue una exigencia de su partido.
La edil de Compromís, Laura Morant, ha señalado que el voto en contra de su partido se debe a la postura crítica que siempre ha mantenido Compromís en lo que concierne al canon del agua y al uso que se hizo del mismo. “Ese dinero nunca se destinó a mejorar las infraestructuras y el servicio del agua potable”, ha señalado resaltando que rechazan tanto la gestión realizada por el PSOE como la del PP.
En este sentido, ha expresado que su partido “ha decidido ser coherente con él, porque estamos en contra del regreso de los 55 millones del canon del agua a Aguas de Valencia y necesitábamos tiempo para buscar otros mecanismos aunque entendemos que el tiempo jugaba en contra”.
Cabe recordar que la problemática con Aguas de Valencia se remonta a 2008, cuando el Ayuntamiento de Gandia, gobernado por José Manuel Orengo, adjudicó el servicio de abastecimiento a Aguas de Valencia y abonó al consistorio 55 millones de euros en concepto de canon anticipado por una concesión de 25 años. En 2010, la ciudad recibió otro canon de 12 millones de la misma empresa para el mantenimiento de la red de alcantarillado. En total, 67 millones que debían invertirse en dichas obras.
Una acción que fue denunciada por el Partido Popular gobernado entonces por Aturo Torró. Los populares denunciaban que los socialistas se gastaran 67 millones en año y medio sin dedicar un sólo euro en el mantenimiento y reparación de la red de aguas.
Denuncia que hoy reitera el Partido Popular, ahora liderado por Víctor Soler. El líder de los populares en Gandia ha indicado que la solución al problema pasa por “una diagnosis de en qué se gastaron ese dinero y qué haremos hasta el vencimiento del contrato, que es de 25 años”.
