La cultura estrena nueva normalidad

VALÈNCIA. El telón sube tímidamente y se van ocupando de nuevo las butacas. Las obras expuestas en los museos se abren a nuevas miradas e interpretaciones y los ciudadanos retoman los hábitos culturales que les arrebató la pandemia. O, al menos, con más compañía. Con las nuevas medidas implantadas por Sanitat la cultura (a excepción de la música) puede retomarse casi al 100%, pero… ¿quién está volviendo antes y quién está siendo más 'perezoso'?

El teatro, un poco de todo

En conversación con este diario, Abel Guarinos, director general del Institut Valencià de Cultura (IVC), asegura que, a pesar de que es difícil pasar del 75% al 100% en las primeras funciones, el teatro está capacitado para lanzarse a ofrecer todas sus localidades, siempre y cuando se sigan manteniendo las medidas sanitarias. 

Así, teatros como el Rialto, el Principal -dependientes del IVC- y La Rambleta operan ya al máximo de su capacidad. Lorena Palau, directora de La Rambleta, aclara que ofrecen todas sus localidades de manera inmediata, tras unas restricciones que han supuesto un “esfuerzo enorme colectivo por parte de todos los teatros”. Esta es, esgrime,  la única manera de que los profesionales del sector sufran las mínimas consecuencias de una crisis que se alarga en el tiempo.

Sin embargo, no todas las salas se están poniendo al día con la nueva norma y la toman con especial cautela, a pesar de la 'vía libre' de Sanitat. Así, desde la dirección de Les Arts aún no se aventuran a ocupar todo su aforo. El coliseo pide un poco más de tiempo para ejecutar la reorganización y aseguran que se debe tener en cuenta cuestiones como la de las localidades de los abonados. “El teatro no es como un concierto pop en el que te puedas levantar [...] No es algo que se pueda hacer de la noche a la mañana”. 

En este sentido, apuntan desde Les Arts a este diario que contactarán con los 2000 abonados con los que cuentan actualmente para contemplar si mantendrán sus localidades o si se cambiarán de lugar según sus intereses. Además aclaran que hay que tener en cuenta cuestiones como “contemplar el plano de la sala para las reubicaciones”. Desde dirección también declaran que prevén que sus salas se puedan ocupar al 100% de forma gradual y en función del espectáculo y el estado de las ventas.

“Siempre has tenido un espectador al lado, no pasa nada si os tocáis codo con codo”

En el extremo contrario se sitúa Abel Guarinos, quien recalca que en un principio, y a pesar de los abonados, las butacas que han quedado vacías pueden salir a la venta. “Siempre has tenido un espectador al lado, no pasa nada si os tocáis codo con codo”, declara. De todos modos comprende que si algún teatro quiere hacer la desescalada de forma paulatina está en su derecho, ya que en algunos casos se pueden contemplar motivos como la falta de personal, o ya sea porque quieran hacer ver al público que están en una transición progresiva.

Cine, el quiero y no puedo 

En el caso de los ABC Park y los cines Lys entre otros, cuentan con una reducción de su aforo total en casi un 25%. Si bien en la 'gran' desescalada anunciada a principio de semana todo apuntaba a que los cines volverían al 100% de su capacidad, la Conselleria de Sanitat modificaba la norma apenas dos días después, volviendo a restringir el acceso a gran parte de las salas. Así, tal y como modificó después, en el supuesto de que en la sala se pueda consumir comida y bebida será necesario dejar un asiento libre de distancia en la misma fila entre personas o grupo de personas no convivientes, lo que reduce considerablemente el aforo. 

Aunque no todos los cines se ven afectados por este retroceso en la normativa, en el caso de los cines Babel (donde no se puede comer ni beber en sus salas) sus salas sí que se han podido abrir al 100%, y desde entonces la afluencia ha mejorado con creces. 

Los museos abren, la música sigue con dudas

Museos como el IVAM ya no cuentan con ninguna restricción de aforo. Lo mismo sucede con el Museo de Bellas Artes que no cuenta con restricciones de aforos limitados en el acceso a las salas, tanto en las de colección permanente como en las exposiciones temporales. Además han ido ampliando las visitas de grupo de solo unidades familiares en principios de mayo hasta 15 personas por grupo desde el pasado 3 de junio. 

Sin embargo, en el Centre del Carmen, explican, incrementará sus aforos en función de las características del montaje de cada exposición, exceptuando los eventos organizados al aire libre, donde sí se recuperará el 100% del aforo. En su caso, han optado por una desescalada más progresiva, teniendo en cuenta que el aforo depende de cada sala y de cada exposición.

La gran desescalada dejó buenas sensaciones a los teatros, que han vuelto a cobrar el vigor de antaño, una revisión de la norma que ha dejado, sin embargo, con más de una incógnita a la música, especialmente a los grandes festivales. Aunque desde hace días se planteaba la posibilidad de que el Consell relajara las medidas, especialmente de cara al Montgorrock, finalmente el festival llegó sin novedad. Tampoco con las nuevas medidas anunciadas el lunes, una situación que sitúa todos los ojos en las próximas citas, que esperan ahora que en los próximos días se aclaren las dudas. Por lo pronto,  el festival Love to Rock ya ha prometido ser el primero sin restricciones de baile. 

De cara al futuro…

Guarinos aclara que la desescalada cultural es “el momento de aprovechar las artes culturales y visuales para curarnos anímicamente, artísticamente y económicamente”. Además recalca la importancia de mantener todas las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades: uso obligatorio de mascarilla, disposición de gel hidroalcohólico en las salas y aseos, limpieza y desinfección de los espacios y sistemas de ventilación.

También cabe tener en cuenta que es probable que estas medidas se mantengan, se amplíen o se modifiquen en función de lo que recomienden y dictaminen las autoridades sanitarias. Sin embargo, en esta nueva normalidad la cultura es segura, y no hay por qué mostrarse tímido a la hora de recuperar el 100% del aforo siempre que sea posible. “La Comunitat Valenciana tiene un altísimo índice de vacunación, eso ayuda a que podamos disfrutar de la cultura de manera segura”, declara Guarinos.