'La patética historia de Niño Piña' reflexiona sobre qué es un monstruo en Carme Teatre

VALÈNCIA. La compañía madrileña Viviseccionados desembarca en la sala Carme Teatre, los días 27 y 28 de abril, con La Patética Historia de Niño Piña, una obra que explora los límites entre lo bello y lo grotesco. Dirigida por Jose Andrés López, esta creación, en residencia nacional, plantea una reflexión sobre la monstruosidad y lo humano a través de distintas disciplinas escénicas, partiendo de su versión inicial en el año 2019, para a través de un nuevo elenco y una revisión completa, construir un nuevo artefacto escénico en su versión actual, una muestra de la madurez y evolución de las propias creatividades.

Los intérpretes hacen uso de la palabra y el cuerpo encarnando diversas situaciones, oníricas y realistas, realizando así un viaje de personajes y situaciones que nos puedan parecer fantasiosas y lejanas pero también terriblemente cercanas. En ellas se abordan diversos temas como la exclusión social, las consecuencias del bullying en la niñez o el abuso físico entre las personas.

La puesta en escena se presenta como una fusión de performance, teatro de texto y teatro danza, donde predomina un fuerte contenido poético. La palabra inicialmente se muestra ingenua y sencilla, pero pronto revela profundidad y dolor, confrontando al espectador con la realidad de la fealdad y la belleza, la monstruosidad y el encanto. Estas dualidades, a menudo invisibles a simple vista, se exploran desde la perspectiva del juicio precipitado.

 José Andrés López, creador de la obra, destaca que esta nueva versión escénica presenta cambios significativos en su enfoque artístico. Anteriormente más centrada en la danza, la producción ahora se inclina hacia la performance y el teatro físico. Con la incorporación de un nuevo elenco, la obra se ha adaptado a las particularidades del mismo, resultando en una propuesta más performática y física. El autor, galardonado con el Premio SGAE Autor Exprés en 2017 por su obra "Fauces", describe esta versión como más reducida pero explosiva, resaltando su naturaleza física y su dinamismo en el ámbito de las artes vivas.