VALENCIA. Casi un año ha pasado desde que se celebraran las elecciones municipales y autonómicas, las del cambio en las instituciones valencianas. Once meses de diagnóstico y primeras actuaciones que se han visto reflejadas en la creación de nuevas nomenclaturas e imágenes con las que identificar el proyecto político de Compromís, PSPV y, en el caso del cap i casal, València en comú. No son pocas las marcas culturales, algunas de nuevo cuño y otras rediseños de otras ya existentes, que desde verano de 2015 sirven para comunicar las iniciativas culturales de la nueva corporación, que quiere hacer explícito a través de nombres e imágenes la transición a nivel autonómico y local. La de más reciente creación: Teatre del Poble Valencià.
Este sello servirá como una nueva unidad de producción, "no como un invento de un contenedor o una construcción", para identificar los espectáculos propios, tal y como anunció el recién elegido director del Institut Valencià de Cultura (IVC), Abel Guarinos, en una entrevista con Europa Press. “La idea es que con este sello las producciones del Institut Valencià de Cultura tengan una personalidad, defender a nuestros autores y nuestros intérpretes y conseguir un repertorio universal en valenciano", afirma Guarinos. De esta manera, bajo el paraguas del 'Teatre del poble valencià' se producirán montajes de autores valencianos -tanto en valenciano como en castellano- y repertorio del teatro universal en lengua valenciana.
"No estamos en momento de contenedores nuevos, sino de aprovechar los que ya hay y dotarlos de contenido", indicó el director de la entidad cultural. Y es precisamente el Institut Valencià de Cultura una de las nuevas nomenclaturas que quiere potenciar el Conseller d'Educació, Investigació, Cultura i Esport Vicent Marzà, cuya intención es enterrar de manera gradual la marca paraguas CulturArts, creada en 2012 y que aglutinaba el Instituto Valenciano de la Música (IVM), el Instituto Valenciano del Audiovisual y de la Cinematografía (IVAC), Instituto Valenciano de Conservación y Restauración (IVACOR) y Teatres de la Generalitat.
"CulturArts a los profesionales del sector les recuerda una época de recortes y en ciertos casos de menosprecio a alguna de las disciplinas; a los trabajadores de los entes autonómicos les recuerde un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y a la ciudadanía no le recuerda nada, porque no se creó marca ni vínculo [...] No fue fruto de un pacto o de un estudio de las diferentes disciplinas, sino de un decreto de reestructuración del sector público y fundacional y en un mismo cajón se puso teatro, danza, circo, conservación del patrimonio y cine, mezclando además entes públicos con una mercantil, como era Castelló Cultural; una bomba de relojería y lo que se pretende es que sea algo mucho más coherente", explica Guarinos al respecto del cambio de nombres.
Pero no sólo las entidades cuentan con su propia marca, las políticas a desarrollar por el equipo de gobierno autonómico también. De esta forma, la conselleria liderada por Marzà ha decidido crear una imagen y nombre específico para aglutinar el plan estratégico cultural para el periodo 2016/2020. Así, bajo el título 'Fes Cultura', la administración autonómica resume la hoja de ruta para los próximos años que incluye, por ejemplo, el plan de internacionalización, de fomento a la lectura o de mecenazgo.
En el ámbito local, es la Universidad Popular la que ha experimentado el makeover más reciente, un cambio de imagen que tiene como objetivo potenciar la entidad desde un punto de vista promocional. De igual manera, el cambio viene acompañado de una nueva página web dedicada exclusivamente a la actividad del organismo, portal presentado hace una semana por la concejala de Igualdad y vicepresidenta de la Universidad Popular, Isabel Lozano, que también servirá como herramienta de trabajo para sus empleados. Más allá del caracter publicitario, la web también persigue un objetivo interno, el de facilitar una red de intercambio de recursos entre su personal formador, materiales para la participación, recursos pedagógicos, publicaciones propias y un archivo documental.
Otro de los grandes proyectos, en este caso no de rediseño sino de creación de una nueva marca, corrió a cargo de la concejalía de Cultura Festiva, que antes de la llegada del tripartito era conocida simplemente como concejalía de Fiestas. El área liderada por el edil Pere Fuset presentó en noviembre de 2015 la marca 'Festes de València', que engloba las 65 celebraciones que tienen lugar en el cap i casal. Desde las fiestas de barrio y pedanías hasta la procesión del Corpus, la Feria de Julio o las Fallas.
La nueva marca, firmada por el ilustrador Carlos Corredera, quiere encauzar un tipo de turismo asociado a las celebraciones tradicionales, un proyecto que "necesita una estrategia propia", indicó el concejal en su presentación. Esta imagen sustituye a la creada por el gobierno popular, que consistía en el lema 'Fem festa al cap i casal', una mera frase que acompañaba al escudo de Valencia. Precisamente en el ámbito turístico, el nuevo gobierno enterró otra de las grandes marcas para dar paso a un nuevo proyecto. Así las cosas, la Diputación de València cambió 'Valencia, Terra i Mar' por '*València, València, València, Turisme'. Diseño de Dídac Ballester, representa la forma de la provincia de Valencia, con un asterisco simbolizando el Rincón de Ademuz. Hasta aquí algunas de las nuevas marcas aunque no serán las últimas. La concejala delegada del área de Cultura del Ayuntamiento de Valencia, Glòria Tello, anunció su intención de potenciar un plan de comunicación unido a una imagen de marca que identifique los recursos culturales de la ciudad, un proyecto que todavía no se ha ejecutado.
