GRUPO PLAZA

la dirección anterior ya hizo una campaña para que la ciudadanía colaborase en las cuentas de 2017

Los 'montielistas' tachan de 'plagio' la propuesta de presupuestos participativos de Estañ

17/08/2017 - 

VALÈNCIA. La máxima "que algo cambie, para que todo siga igual" expresada en su día por un personaje del autor Giuseppe Tomas di Lampedusa, siempre ha sido una constante en la política. Esta vez, según la facción afín al exsecretario general de Podemos, Antonio Montiel, la ha implantado su sucesor y ubicado anteriormente en el sector de los críticos, Antonio Estañ, a la hora de aplicar sus cambios en la formación morada. El síntoma, a juicio de esas voces y más allá de las promesas no cumplidas por el momento, es el proyecto de presupuestos participativos.

El proyecto de Estañ para conseguir la secretaría general del partido de los círculos en el Vistalegre valenciano tenía distintas aristas que, en definitiva, iban dirigidas a diferenciarse de la anterior etapa de la formación morada valenciana con Montiel al frente. Y la más destacada de ellas era aumentar la presión al Consell, al considerar que había faltado exigencia hasta ahora como socio parlamentario crítico. Con la auditoría ciudadana del Botànic como primera medida para subir las demandas al ejecutivo bicolor, la esencia del planteamiento del de la Vega Baja y sus afines giraba en torno a un concepto clave: el empoderamiento de las bases. El diputado por Alicante quería más participación de los inscritos de Podemos en las políticas desarrolladas en las instituciones.

Así, tal y como publicaba Levante, una de las ideas que sopesa la recién armada Ejecutiva de Podemos liderada por la secretaria de Organización, Lidia Montero, es que los inscritos decidan sobre parte del próximo Presupuesto de la Generalitat que comenzará a debatirse y negociarse a la vuelta de las vacaciones estivales. Esto es, el Consell de Coordinació pondrá sobre la mesa que las bases puedan participar en la elaboración de los presupuestos y señalen en qué creen que es mas necesario invertir en el próximo ejercicio.

Fabiola Meco, Antonio Estañ, Pilar Lima, Antonio Montiel. Foto: KIKE TABERNER

Una sugerencia que el sector afín a Montiel recibe con tibieza, puesto que ésta ya fue una política realizada por el partido en 2016. "No es nada novedoso, eso ya lo hicimos el año pasado", señala fuentes parlamentarias de Podemos. A su vez, afean que ésta se "venda" como una iniciativa innovadora y aparejada a la nueva dirección con aire regenerador. 

Así, cabe recordar que, tal y como publicó Valencia Plaza, un mes después de que el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, presentara la Ley de Acompañamiento a las cuentas autonómicas de 2017 y Podemos anunciara que las enmendaría para bajar los impuestos, la formación aprovechaba para poner en marcha la campaña Els teus Pressupostos para que la ciudadanía pudiera participar en el desarrollo de las enmiendas que la formación presentaría en Les Corts.

"Hubiese sido nuevo si hubiesen abierto ese proceso de participación antes de que las consellerías cerrasen los presupuestos. Podemos consiguió modificar aproximadamente 29 millones del Presupuesto de 2017, que es una cifra relativamente simbólica –las cuentas del ejercicio anterior sumaban 17.724.974,08 millones de euros-", señalan fuentes parlamentarias del partido morado. "Si realmente querían haber sido exigentes con el Consell en esta nueva etapa, se podrían haber planteado un paquete de exigencias presupuestarias antes de que las consellerias cerrasen sus cuentas –las distintas áreas del Consell cuadraban el presupuesto para 2018 en el mes de julio– y hacer partícipe a la gente ahí. Hacerlo después, en la fase de enmiendas, da menos margen de maniobra como quedó comprobado el año pasado, donde pudimos hacer pequeños cambios", añade.

Desde el sector afín al exdirigente y portavoz del grupo en Les Corts, sin embargo, van más allá. Y ponen sobre la mesa una cuestión que el propio Montiel ya planteó sin éxito y con el portazo de PSPV y Compromís: la entrada al Consell. Esta facción considera, vista la experiencia de estos dos años, que la mejor forma para condicionar las políticas y los presupuestos del ejecutivo valenciano hubiese sido formar parte de él. 

Reunión de Podemos con el conseller de Hacienda, Vicent Soler, para debatir los Presupuestos de 2017. VP

Una opinión que comparte el secretario general, Pablo Iglesias -a pesar de las diferencias entre los montielistas y la dirección nacional de los morados-, y que tiene como laboratorio a Castilla la Mancha, donde recientemente Podemos ha entrado a formar gobierno con el socialista Emiliano García Page. "Desde fuera se puede tensionar al Consell, y lo hemos hecho. Pero desde dentro tienes margen para decidir. Creo que fue un error no entrar en el Consell. Perdimos una buena oportunidad", declaran las mismas fuentes consultadas por este diario.

Esta fórmula, sin embargo, está totalmente descartada por parte de Estañ que cerró la puerta a copiar la vía manchega cuando se reunió recientemente con el president Ximo Puig y la vicepresidenta Mónica Oltra. De hecho, los afines al actual secretario general ya reclamaron cuando Montiel pidió que se negociara una entrada en el Ejecutivo valenciano una consulta a la militancia para poder llevarlo a cabo. La reestructuración del Gobierno valenciano del pasado verano y las dudas de la dirección nacional, así como de la entonces facción crítica de los morados, enterró una entrada que a menos de dos años para los próximos comicios autonómicos se da por imposible.

Desdel sector del exsecretario general, además, remarcan otro posible incumplimiento del proyecto que defendió Estañ para Podemos. Si el actual secretario general siempre ha abogado por hacer un Podemos fuerte y autónomo, que compita con Compromís y Esquerra Unida en lugar de coaligarse electoralmente, los contactos con la formación izquierdista que lidera David Rodríguez en la Comunitat han despertado las alertas. No en vano, la facción afín a Montiel defiende las tesis 'errejonistas' de no repetir la confluencia con fuerzas como Izquierda Unida. Con apenas unos meses al frente de la secretaria general, Estañ ve cómo los 'montielistas' le echan en cara que su cambio parece acogerse al método 'lampedusiano'.

Mónica Oltra, Ximo Puig y Antonio Estañ. Foto: GVA

Noticias relacionadas

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email


Quiero suscribirme

Acceso accionistas

 


Accionistas