La publicación, una de las más descaradas de la Transición, fue objeto de un atentado terrorista por parte de la extrema derecha nunca aclarado del todo
4/10/2015 -
VALENCIA (EP). La periodista valenciana María IranzoCabrera ha recibido el Premio Internacional de Investigación Doctoral que otorga la Asociación de Historiadores de la Comunicación por su tesis titulada “La revista satírica El Papus (1973-1987). Contrapoder comunicativo en la Transición Política Española. El tratamiento informativo crítico y popular de la Transición Española”.
La periodista defendió la tesis en 2014 en la Universitat de València (UV) y el tribunal la calificó con Sobresaliente con Mención Cum Laude y el pasado mes de mayo ya fue premiada con un accésit del Premio Lorenzo Gomis que otorga la Sociedad Española de Periodística.
María Iranzo señaló en un comunicado que su investigación "hace justicia al primer medio de comunicación que sufrió un atentado terrorista en la transición española, que se saldó con una víctima y diversos heridos".
Entre los méritos de esta publicación destacó que El Papus "recuperó la sátira política expresada, como en la II República, con crispación y radicalidad, y aprovechó la frustración sexual de la ciudadanía, lo que provocó que se convirtiera en líder de ventas en el mercado editorial del periodismo de humor en el periodo comprendido entre julio de 1975 y marzo de 1976".
El objetivo principal de esta investigación ha sido analizar la contribución del semanario a la percepción del proceso histórico de la transición política. En este sentido, "desde una perspectiva histórica, cualitativa y cuantitativa, se ha querido constatar la creación de un lenguaje para abordar la nueva cultura política", afirmó.
La periodista María Iranzo
Castigada por sus “actitudes libertarias”
El Papus llegó a los quioscos en octubre de 1973 y "fue original en el diseño”, con un predominio de las tiras cómicas sobre el texto, “y en el mensaje crítico e ingenioso con el que reflexionó sobre hechos ya conocidos por unos lectores interesados por la política y la información diaria".
Las autoridades gubernamentales y judiciales "castigaron" su defensa de actitudes rebeldes y libertarias”, agregó Iranzo, “especialmente en el periodo comprendido entre 1975 y 1976, coincidiendo con la máxima tirada y difusión de la revista.
Según la autora, tres motivos justifican la tesis doctoral: "La inexistencia de un estudio monográfico exhaustivo, publicado dentro o fuera de España, de esta publicación satírica; el propio atractivo de la revista en tanto fue la más longeva y provocadora del mercado editorial humorístico de la Transición; y su inserción en el proyecto de I+D+i 'El humor frente al poder: la Monarquía, el Ejército y la Iglesia a través de la comunicación satírica en la España contemporánea' (1930-1936 / 1975-1982), cuyo objetivo es analizar la comunicación satírica española durante estos dos periodos mediante una ficha metodológica diseñada a partir de las aportaciones de teóricos de la sátira mediática".
El Papus, que se presentaba como “revista satírica y neurasténica”, fue una revista editada por el grupo Godó a través de su filial Producciones Amaika durante gran parte de su existencia, y en la que participaron intelectuales como Antonio Franco o Maruja Torres y dibujantes como Gin, Ivà o Carlos Giménez (aquí publicó su mítica obra Paracuellos).
Por su tono, tuvo varios problemas con la censura (fue suspendida en dos ocasiones) y el 20 de septiembre de 1977 sufrió un atentado por parte de la Triple AAA (Alianza Apostólica Anticomunista) que provocó la muerte del conserje y 17 heridos. Aún hoy se debate la participación de miembros de las fuerzas de seguridad en los hechos. En 1978, el Salón Internacional de Lucca le concedió el premio Yellow Kid, uno de los más prestigiosos en el mundo de la historieta.
Escribe todos sus reportajes con viñetas, Jess Ruliffson cree en el cómic como medio para hacer periodismo. Su gran obra, Invisible Wounds, es lo que pretende. Tratar de acercar la figura de los veteranos de guerra no para juzgarlos, sino para comprenderlos. Es una colección de testimonios en primera persona de ex marines que aborda temas tan dispares como la homofobia, el suicidio y el estrés postraumático con un enfoque aséptico, pero con una fuerte carga emocional inevitable
Una de las obras más interesantes y singulares del dibujante de cómics salido del underground de Los Angeles en los 80, Beto Hernández, es el recorrido semi-autobiográfico de Tiempo de canicas. Unas páginas en las que muestra cómo discurrían las complejas relaciones de los niños, que no hacían otra cosa que simular el mundo irracional de los adultos
Las cabeceras de EC Comics dedicadas a la ciencia ficción y fantasía en el espacio en los años 50 tenían varios mitos recurrentes. Por supuesto, los alienígenas eran el principal, al igual que las paradojas espacio/tiempo, etc… pero había un modelo de historia que tiene un encanto imperecedero, la de aquellos que se perdían en el espacio o los que encontraban naves abandonadas de náufragos espaciales. Una idea que luego llegó a la TV, cine y también está presente en múltiples videojuegos
La periodista María Iranzo
