VALÈNCIA. La Asociación Valenciana de Startups había puesto muchas esperanzas en convertir la Estación Marítima de la Marina de València en uno de los focos principales del ecosistema tecnológico de la ciudad y liderar un espacio con el que proyectar València como hub internacional. Sin embargo, como publicaba este jueves Valencia Plaza, la compañía belga Fosbury and Sons es la favorita para adjudicarse la gestión del espacio.
Este miércoles se reunía la mesa de contratación en las oficinas del Consorcio València 2007 para abrir las ofertas económicas de las dos empresas que se disputaban el espacio. Aunque el proyecto técnico planteado suponía un 50% de la valoración -donde entraban apreciaciones subjetivas-, la oferta económica suponía el otro 50%. Ahí fue donde Fosbury and Sons tomó la delantera al proyecto liderado por las startups valencianas.
Sin embargo, algunos agentes destacados del sector a nivel local y nacional manifestaban su malestar tras conocer la situación e insistían a la falta de voluntad desde la administración por ceder el espacio al proyecto valenciano. El primero en hacer pública su disconformidad a través de la red social Twitter fue Diego Moya, CEO de Entrenarme y miembro de la junta directiva de la asociación, donde recordó a través de un hilo cómo había sido el proceso desde que solicitaron un espacio en la dársena para concentrar a los proyectos hasta el concurso final.