Amparo Matíes. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La abogada valenciana Amparo Matíes fue reelegida este jueves para un tercer mandato de cuatro años como presidenta del Club de Encuentro Manuel Broseta. La candidatura de Matíes se impuso, en la votación celebrada durante una tensa asamblea general de la asociación, a la presentada por el también abogado Francisco Martínez Boluda, por 143 votos a 112. Tres socios votaron en blanco.
A la asamblea general, celebrada en el hotel SH Valencia Palace, asistieron 106 socios y estuvieron representados mediante delegación otros 167. No todos los presentes votaron, ya que algunos -hasta quince, según muestran los números- abandonaron la sala debido a que las numerosas intervenciones alargaron la duración del acto, que se prolongó hasta superar las cuatro horas y acabó pasadas las 11 de la noche.
No hubo debate electoral entre los candidatos, pero sí un agrio cruce de acusaciones entre ellos y también entre miembros de sus respectivas candidaturas respecto a la limpieza del proceso electoral y la imposibilidad de una candidatura de consenso. El intercambio de argumentos derivó en un tenso y para todos incómodo desencuentro como nunca se había visto en el Club de Encuentro, como criticaron, abochornados, los históricos miembros del club Vicente Garrido y Marita Boluda.
Amparo Matíes es la presidenta del Club desde 2015, cuando tomó el testigo de Francisco Puchol-Quixal, y fue reelegida en 2020, en aquel caso sin rival, puesto que fue la única candidata.
La nueva junta directiva presidida por Matíes estará formada por Juan Valero de Palma como vicepresidente, Begoña Longás como secretaria y Ubaldo Nieto como tesorero. Y como vocales: Eva Blasco, Joaquín Martín Cubas, María José Navarro, Tomás Vázquez, Asunción Boix, Joan Carles Carbonell, Francisco Javier Puertas, Francisco Lloret, Felisa Alcántara y Álvaro Bombal.
El Club de Encuentro fue constituido en junio de 1984 como foro de debate y opinión bajo los principios de la independencia y la pluralidad, con el objetivo de fomentar el diálogo y el intercambio de ideas. Su primer presidente fue José Luis Boronat. El segundo fue Manuel Broseta Pont, asesinado por ETA en enero de 1992 mientras ostentaba el cargo, motivo por el que el club pasó a denominarse Club de Encuentro Manuel Broseta.
