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VALENCIA. El secretario general del PPCV, Serafín Castellano, confirmó este lunes lo que se preveía respecto a las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado de 2014 que, hipotéticamente, iban a presentar los populares valencianos para mejorar las inversiones en la Comunitat. El plazo se ha dejado expirar sin presentar objeción alguna a unos PGE que destinan un 8,1% menos en inversiones valencianas respecto a este ejercicio, quedándose en el 6,2% del total nacional.

De nuevo, la estrategia ha fallado. Tanto el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, como el vicepresidente del Consell, José Císcar, habían mantenido viva la esperanza al manifestar públicamente su intención de evaluar las cuentas estatales y presentar enmiendas para aumentar las partidas para la Comunitat. Menos de un mes después de hacer públicas estas intenciones, el PPCV ha dejado expirar el plazo sin enmendar los presupuestos impulsados por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

Llueve sobre mojado, dado que el pasado año las enmiendas presentadas por el PPCV tuvieron escaso éxito. De los 144 millones de euros de mejora que Fabra pensaba conseguir en la revisión de las cuentas, apenas se lograron 100.000 euros para la línea ferroviaria Xàtiva-Alcoi.

Este fue un duro golpe para el jefe del Consell, quien había anunciado en Les Corts su intención de presentar enmiendas: ya fuera por precipitación, fallo en la negociación o pulso perdido, los populares valencianos salieron trasquilados por su atrevimiento.

Este año, la lección se ha aprendido a medias. Inicialmente Fabra defendió que las cuentas proyectaban "hacia el futuro" a la Comunitat, para después matizar al día siguiente la intención de presentar enmiendas porque "a todos nos gustaría más". Una idea en la que se ha abundado en las últimas semanas, indicando que se estaba trabajando en esa línea.

No obstante, Serafín Castellano cambió el discurso este lunes al confirmar que no se habían presentado enmiendas porque "se negociaron con el Gobierno las inversiones prioritarias". Aunque es cierto que algunas de las solicitudes valencianas se han atendido, después de los sucesivos tropiezos del PPCV frente a Madrid, cuesta creer las palabras del secretario general: "Se eguirá trabajando en el día a día con los ministerios para tener la inversión prioritaria para los valencianos".

La carencia de peso para lograr algún gesto de Madrid ha vuelto a evidenciarse. Una situación que contrasta con el apoyo -en el pasado no fue así- que ahora gozan los socialistas valencianos por parte del PSOE. Con esta cobertura, el secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha presentado enmiendas por un montante de 500 millones de euros, e incluso ha instado a los diputados valencianos del PP en el Congreso a que apoyen estas propuestas.

En los PGE de 2014 las inversiones en la Comunitat Valenciana caen un 8% respecto a este año, en el que ya se habían desplomado un 35% en comparación con 2012. El bagaje gris de Fabra en este apartado se agrava con los logros de otros compañeros de partido, como el presidente balear, José Ramón Bauzá, quien ha logrado sacar adelante una enmienda dirigida a infraestructuras hidráulicas por valor de 74 millones de euros.

REFORMA DEL ESTATUTO APLAZADA: OTRO SIGNO DE IMPOTENCIA

Meses atrás, se produjo otro hecho destacado en la pelea desde la Comunitat para percibir mejores inversiones del Estado. La reforma del Estatuto pactada por unanimidad en Les Corts iba destinada precisamente a lograr que se equipararan a la población las inversiones por parte del Gobierno central.

Sin embargo, el Ministerio de Hacienda con Cristóbal Montoro al frente mostró su desacuerdo con sacar adelante en el Congreso de los Diputados esta iniciativa. Ante la perspectiva del rechazo en la cámara, el PP valenciano solicitó el aplazamiento de la reforma para evitar el trago de que sus compañeros de partido ‘tumbaran' la iniciativa.

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