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VALENCIA. La multinacional sueca Ikea ya está preparada para su desembarco en la Comunitat Valenciana. Mientras las obras de su centro en Alfafar (Valencia) avanzan a buen ritmo, el de Alicante, que iba a ser su primer establecimiento, está a punto de conseguir desembarazarse de la trampa en la que se vio encerrado al anular el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana el pasado mes de mayo el Plan de Actuación Integrada de Rabassa.
La Generalitat tiene ya ultimada la declaración de este proyecto alicantino como Actuación Territorial Estratégica (ATE), una condición que permite a los impulsores de iniciativas de grandes dimensiones y técnicamente complejas agilizar los tramites administrativos necesarios para su puesta en marcha. A partir de esta declaración, en ochos meses podrían empezar las obras.
La Administración valenciana entiende que el Ikea de Rabassa cumple los requisitos establecido por la Conselleria de Infraestructuras y que pasan por que sea privado y cuente con un destacado impacto económico y de generación de empleo, al igual que otras vertientes como su relevancia social tanto en los municipios a los que afecta directamente como en el entorno estatal e internacional.
MÁS DE DIEZ AÑOS DE PROYECTO EN EL AIRE
La construcción del Ikea cierra el círculo abierto en 2002 con la presentación del llamado Plan Rabassa, un proyecto que planteaba la construcción de más de 15.000 viviendas en cuatro millones de metros cuadrados junto a las lagunas de Rabassa y al margen del Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad. En estos once años, ha ido tropezando con distintos obstáculos para su realización tanto en materia medioambiental como por la propia capacidad económica de sus impulsores.
El grupo Espaiverd, vinculado al Banco de Valencia es el primer impulsor de esta iniciativa, a cuya oferta siguen las que presentan Gestión de Ambientes Empresariales de la familia Murcia Puchades y Viviendas Sociales del Mediterráneo, de Enrique Ortiz. Es éste último el que se lleva la adjudicación provisional en 2005, una fecha a partir de la cual empiezan las movilizaciones contra el proyecto por parte de diversos colectivos cívicos.
El cambio de postura hacia esta iniciativa del PSOE alicantino rompe la unidad inicial del consistorio en 2006 y se agudiza con nuevas críticas tras el visto bueno del Consell, que llega en 2008, reduciendo la edificabilidad del área en un 11,6% y hasta las 13.500 vivienda. En ese momento, comienza una lucha judicial que ha terminado por la anulación en el TSJCV con una sentencia suficientemente contundente como para que el Ayuntamiento de Alicante renunciara a presentar recurso ante el Tribunal Supremo.
Todavía vinculada al empresario Enrique Ortíz, la propuesta final ha resultado mucho más modesta, reduciéndose a la propia construcción y puesta en marcha gracias a la ATE del gran almacén del amueblamiento, prevista hace más de diez años y que necesitará unos años para abrir sus puertas.
CÓMO ES UNA ATE
Hasta la fecha, se han declarado cuatro actuaciones de estas características, aunque con suerte desigual por motivos ajenos a la propia declaración de la iniciativa como ATE. Se trata de los proyectos Valencia Dinamiza, Valle Mijares - Yátova, Alcoinnova y Puerto Mediterráneo.
En total, estas actuaciones estratégicas se espera que generen una inversión de 2.700 millones de euros y que contribuya a la generación o mantenimiento de 14.000 puestos de trabajo directos e indirectos en el área inmediatamente afectada y en el resto de la Comunitat, según la propia Generalitat
La primera vez que se puso en marcha una ATE fue con la denominada Valencia Dinamiza e incluía la construcción del nuevo estado del Valencia y otros espacios de ocio y servicios que debían acompañarlo en la manzana de la avenida de las Cortes Valencianas de Valencia.
TURISMO, INNOVACIÓN Y COMERCIO
A continuación se han aceptado otras propuestas como la desarrollada por la empresa Mijares Resort en la zona de la Paridera de Yàtova y que se concreta en un complejo de usos turísticos y deportivos con una inversión de 35 millones de euros en el entorno del río Mijares.
Y a estas dos declaraciones les han seguido la que afecta a la propuesta del parque empresarial Alcoinnova, situado en Alcoy y orientado a la implantación de industria con un elevado contenido tecnológico en esta comarca tradicionalmente industrial. La última en unirse hasta ahora a la lista de ATE en la Comunitat Valenciana ha sido la declarada para la puesta en marcha del macrocentro comercial y de ocio de Puerto Mediterráneo en el municipio de Paterna que se prevé iniciar en 2016.
A diferencia de estos proyectos y el de la Ikea de Alicante, la apertura de otro centro de esta multinacional en Alfafar no ha contado con esta condición especial. Sin embargo, es el que avanza a buen ritmo y prevé ponerse en marcha para finales de 2014 o principios de 2015, tras la elección definitiva de este emplazamiento el pasado año.
Tras los tanteos iniciales por fijan en Paterna esta iniciativa, las compañía sueca optó por un área ya en explotación comercial por grandes superficies como la de Alfafar-Sedaví y que contaba con el impulso de una agrupación local de empresarios que están desarrollando el proyecto, del que ya se puede ver terminada parte de su estructura exterior a los pocos meses de haberse comenzado.
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