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CASTELLÓN (EP). El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, aseguró ayer que sería una "falta de respeto" hacia los desempleados de Castellón que se construyese ahora el Centro de Convenciones diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava, aunque ha señalado que se retomará para "impulsar" la ciudad.

Fabra realizó estas declaraciones en el Mercado del Grao de Castellón tras ser preguntado por cómo valoraba que la Fiscalía provincial de Castellón tenga en "fase de estudio" la denuncia presentada por EUPV en relación con los contratos con el arquitecto Santiago Calatrava que pudieran afectar a esta provincia, denuncia que, en este caso, hacía referencia a los pagos al urbanista por el Centro de Convenciones.

Según afirmó Alberto Fabra, el Centro de Convenciones "es un proyecto que, en estos momentos de situación difícil económica, tenemos que dejar aparcado, pero lo retomaremos porque creo que es necesario para la ciudad de Castellón y para ese impulso que todos queremos para esta ciudad".

Al respecto, señaló que en estos momentos "la coyuntura económica no es la que corresponde para poder hacer este tipo de edificios porque sería una falta de respeto a los cinco millones de parados que hay en este país y a esas 64.000 familias que en Castellón no tienen trabajo y, especialmente, a esos 20.000 que no tienen ningún tipo de subsidio".

"Eso es lo que nos debería de preocupar a todos, aunque sé que a algunos les preocupan otras cosas", indicó Fabra, quien añadió que "en estos momentos solo hay una preocupación para el PP, y es saber qué es lo que tenemos que decir a esas 64.000 familias de Castellón que no tienen trabajo y a esos 20.000 que no tienen subsidio a final de mes para poder llevar a sus casas algo que comer".