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VALENCIA (EP). La Generalitat valenciana ha pagado al arquitecto Santiago Calatrava un total de 94.010.620,65 euros en concepto de honorarios por el proyecto de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA) de Valencia, según ha denunciado este jueves el diputado de Esquerra Unida en las Corts, Ignacio Blanco, en la rueda de prensa posterior a la junta de portavoces. 

Además, en total, el Consell ha abonado 1.102.903.740 millones de euros por este proyecto, incluyendo en esta cantidad los honorarios de Calatrava y los pagos a las diferentes Uniones Temporales de Empresas (UTE) que han participado en la construcción del complejo cultural y de ocio.

Blanco ha ofrecido estas cifras después de pasar cuatro jornadas --los días 20, 23, 27 y 30 de abril-- en CACSA consultando los proyectos, contratos, informes previos a la contratación, pagos y facturas. En total, el diputado ha destinado unas 30 horas a estudiar toda esta documentación.

De los estudios se desprende, según ha dicho, que se han certificado 1.253 pagos a la empresa de Calatrava y a las respectivas UTE que han construido los siete edificios de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Esto, sumado a otros cuatro pagos de los que ya disponía el grupo parlamentario, se tiene constancia de 1.257 pagos acreditados.

De éstos, Blanco ha concretado que la Generalitat pagó a Calatrava en los últimos años algo más de 94 millones de euros en concepto de honorarios, y ha asegurado que el coste total del proyecto, sumando el salario del arquitecto por la redacción y dirección de la obra, más lo que han cobrado las empresas constructoras, es de 1.102.903.740 euros.

Y todo ello sin contabilizar los pagos que no constan en CACSA, que son anteriores a 1995 y que corresponden a las empresas públicas Ivvsa y Vacico. Al respecto, Blanco ha explicado que en el año 1991 es cuando se firma el primer contrato con Calatrava, y en el mismo, Ivvsa acuerda la redacción del proyecto de CACSA. Después, Vacico se subrogó a las obligaciones de Ivvsa y comenzó con la construcción de una torre de telecomunicaciones. Por este motivo, el diputado estima que "aquí pueden haber unos cuantos millones de euros más, y formaría parte de los pagos", ha dicho.

Todo ello, sumado a los 2,7 millones de euros que cobró Calatrava por el proyecto no construido del Centro de Convenciones de Castellón, "hace una cifra redonda de 100 millones de euros en concepto de honorarios al arquitecto", ha aseverado.

Además, Blanco ha criticado que al revisar las condiciones contractuales, se puede observar que las mismas era "muy favorables" a Calatrava, quien cobraba unos honorarios "altísimos", "por encima de lo que se cobra en otros estudios de arquitectura sin exigir garantías", ha apostillado.

En esta línea, ha comentado que estas condiciones retributivas "han ido mejorando con el paso del tiempo, desde 1991 a 2009", y ha subrayado que Calatrava "siempre" facturaba sin IVA por su residencia fiscal en Suiza. Este último hecho ha indicado que es de "dudosa legalidad" y "reprobable" política y éticamente.

INFORMES PREVIOS

Por otro lado, Blanco ha indicado que consultó en CACSA los informes previos a la contratación, y ha lamentado que solo había dos estudios: el previo a la contratación de la construcción del Pont de l'Assut de l'Or, y el de las obras del Ágora --de la ejecución de la obra, no del diseño--.

Con todo, y ante esta situación, el diputado ha criticado que éste --el de CACSA-- es un proyecto que comenzó el PSPV, que fue quien "puso el huevo"; luego Eduardo Zaplana "lo que hizo fue romperlo, darle de comer a la criatura"; y posteriormente Francisco Camps "lo que generó fue un gran monstruo que se ha llevado muchos millones de euros de las arcas públicas".