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VALENCIA. Y Alberto Fabra lo hizo. El líder de los populares valencianos ha demostrado que está decidido a imponer su criterio en el PPCV. En un acto celebrado ayer con jóvenes voluntarios del XIII Congreso Regional, el presidente del partido anunció que el conseller Serafín Castellano será el próximo secretario general del partido. Una designación que ha molestado a amplios sectores de la formación 'popular'.
Sin la presencia del protagonsita del anuncio y rodeado de varias decenas de miembros de Nuevas Generaciones, Alberto Fabra agradeció los servicios prestados al todavía número dos del partido, Antonio Clemente, y aseguró haber "escuchado muchas opiniones" para encontrar el perfil adecuado antes de decidirse. Tras estas palabras, pronunció el nombre del siguiente secretario general: Serafín Castellano.
La noticia se esperaba a lo largo del día. Prueba de ello era la presencia en el acto de las personas más cercanas al próximo secretario general, como la diputada Verónica Marcos y altos cargos de Gobernación como Asunción Quinzá e Irene Rodríguez. Asimismo, también acudió la consellera de Educación, María José Catalá, además diversos alcaldes y concejales.
DE "CORTINA DE HUMO" A REALIDAD
Días atrás, fuentes del Ayuntamiento de Valencia y de la dirección provincial del PP, consideraban que la posibilidad de que Castellano se convirtiera en el número dos del partido era "una cortina de humo". La animadversión de la alcaldesa Rita Barberá y del presidente de la Diputación, Alfonso Rus, hacia el conseller de Gobernación parecían suficiente argumento para que Fabra no adoptara la decisión de nombrarlo. Error.
Desde Alicante, todavía ayer por la mañana algunos cargos cuestionaban, incrédulos, que la elección del presidente del PPCV fuera a ratificarse. Esto confirma la decisión sorprendente y unilateral adoptada por Alberto Fabra, que ha escogido el cónclave regional que se celebrará este fin de semana para mostrar su 'mano dura' a la hora de tomar decisiones.
Para diversas fuentes 'populares', la decisión de Fabra apunta a cotas mayores que las de un simple juego de equilibrios de poder. Algunos, incluso, empiezan a cuestionar que no prepare una alternativa 'exprés' para relevar a Alfonso Rus en la presidencia provincial del partido. Una posibilidad que, desde el entorno del alcalde de Xàtiva, se muestran "preparados" para repeler.
De la misma manera, el simple gesto de situar a Castellano conlleva un 'desaire' a Rita Barberá, quien había propuesto para el cargo al concejal de Urbanismo, Jorge Bellver, un nombre que ahora suena para ocupar una vicesecretaría -diversas fuentes apuntan a que existirán varias-, al igual que el de la diputada castellonense Marisol Linares y un amplio abanico responsables políticos de la provincia de Alicante.
Diversos diputados, alcaldes y cargos del partido en las diferentes provincias, califican de "arriesgada" la decisión de Alberto Fabra. "Cualquier otro nombre podría haber gustado más o menos, pero esta elección ha molestado especialmente", comenta uno de los dirigentes consultados.
Una de las incógnitas más repetidas en el ámbito interno del PPCV es cuánto margen de maniobra va a tener Castellano como número dos del partido. Diversas fuentes vaticinan "roces constantes" y "un aumento de la división interna". En este sentido, diversos dirigentes de la formación 'popular' evidenciaron ayer su "preocupación" por los posibles conflictos que surjan a raíz de la designación. En un período de dificultades económicas y con el Gobierno central y autonómico tomando decisiones complicadas, "lo último que necesita el partido son batallas orgánicas", subrayó a este diario una diputada autonómica.
VOTO EN BLANCO
El malestar existe. Falta por ver hasta qué punto se plasmará en el congreso. En algunos casos, la composición de la ejecutiva que Alberto Fabra realice en el cónclave puede resultar determinante, según explicaron fuentes del PP alicantino. Como ya informó este diario, el sector más cercano a Camps tampoco ve con buenos ojos la elección de Castellano, destacado 'zaplanista' años atrás. La posibilidad de votar en blanco está "abierta".
Desde el entorno de Alfonso Rus, aseguraron haber facilitado propuestas en su día al presidente del partido, aunque declinaron aclarar si ofrecerían nuevos nombres tras la confirmación de que Castellano será el secretario general. Tampoco quisieron pronunciarse sobre la posibilidad de que existiera voto en blanco desde las huestes provinciales. "El voto es libre y secreto", comentaron escuetamente, aunque diversas fuentes consultadas no ocultaron que el malestar podría trasladarse con una papeleta vacía a Fabra. "Cada uno que vote lo que quiera", señaló a este diario un alcalde visiblemente molesto.
En cuanto a Rita Barberá, la decisión de Alberto Fabra no ha hecho sino incrementar la distancia que entre los dos máximos responsables políticos ya existía desde meses atrás. Aunque no se espera que la alcaldesa transmita su descontento bajo los focos del cónclave, fuentes municipales subrayan que "ha tomado nota" del gesto del líder del PPCV.
A estos tres sectores les une su posicionamiento a favor de Camps precisamente cuando se produjo el plante 'zaplanista' en Les Corts Valencianes en 2004. Un hecho acontecido cuando Serafín Castellano era portavoz del grupo parlamentario y persona de confianza de Zaplana en la cámara. En esa etapa se forjó la desconfianza y recelo que todavía perdura hacia el futuro secretario general del partido.
FABRA: "CASTELLANO ES CLAVE PARA DAR MAYOR COHESIÓN AL PARTIDO"
Pese al desconcierto de gran parte del partido por el nombramiento de Castellano, Alberto Fabra atribuyó ayer unas virtudes a Castellano de las que muchos otros dudan. "Es una pieza clave para relanzar el partido y dar mayor cohesión", aseguró.
Serafín Castellano, es licenciado en Derecho por la Universitat de València, fue alcalde del Ayuntamiento de Benissanó entre 1991 y 1999, y también ha ejercido diferentes cargos orgánicos en el PP: fue coordinador general del PPCV, vicesecretario general y presidente provincial de Valencia.
Asimismo, Castellano presidió la Federación Valenciana de Municipios y Provincias desde 1995 hasta 1999 y ha tenido distintas responsabilidades en el Gobierno valenciano como conseller de Justicia y de Sanidad.
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