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VALENCIA. "La Administración no está preparada para afrontar reformas de calado, más si implican reorganizaciones societarias, cambios de modelo de gestión o reducciones de plantillas. En las empresas privadas tampoco los estaban hace tres años, cuando no tuvieron más remedio que echar mano de consultoras para que pusieran orden, les dijesen qué líneas de negocio cerrar, con cuántos trabajadores se tenían que quedar o cómo debía reestructurar su deuda. Por eso recurrieron a consultoras especializadas. Ahora la Generalitat y el resto de Administraciones tienen que recorrer ese mismo camino y nos necesitan".
La reflexión es de un consultor valenciano, uno de tantos a los que la Generalitat ha recurrido para reorganizar fundamentalmente el sector público empresarial. Pero la participación de consultoras o grandes bufetes de abogados, especializados en este tipo de reestructuraciones integrales, no se limita a una cuestión técnica, hasta el punto de que, a medida que avanza la reforma impulsada fundamentalmente por la vicepresidencia de la Generalitat, con su titular José Císcar empeñado en vender la idea de la 'nueva Administración', más se pone de relieve que el Consell ha puesto en manos de este tipo técnicos una reforma que también alcanza a cuestiones de concepto político.
Las auditoras y despachos especializados, se han convertido en una especie de Consell de tecnócratas en la sombra al que se ha encargado el nuevo modelo de Generalitat Valenciana.
El caso más evidente es el de la privatización de la gestión sanitaria. Tal y como adelantó ValenciaPlaza.com, la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) está asesorando a la Conselleria de Sanidad en este proceso. Un asesoramiento que, pese a que la Consellería intenta acotar a aspectos "técnicos o legales", va más allá. En realidad, la base del nuevo modelo de gestión de hospitales y centros de salud que quiere aplicar el Consell tiene fuertes coincidencias con el documento elaborado por PwC en abril, que discurre por la senda de la colaboración público-privada en la gestión de la salud.
LA REESTRUCTURACIÓN DEL SECTOR PÚBLICO
Otro de los grandes campos en los que el Consell ha echado mano de tecnócratas es en la obligada reestructuración del sector público empresarial. En este caso fue Deloitte la consultora encargada de realizar el informe. Un documento base en el que, de nuevo, no solo se adentran en la reestructuración del absurdo número de empresas y fundaciones públicas. El resultado del trabajo de la consultora marca una filosofía también política de organización que se puede trasladar a la Administración Pública.
De igual manera se apuntan en dicha asesoría medidas que, viniendo de una óptica estrictamente empresarial, como no puede ser de otra manera, también tienen implicaciones. La decisión de abrir determinados grupos del sector público a la gestión externa, privatizaciones, tiene unas connotaciones políticas evidentes.
De hecho, para profundizar más en este campo, el Consell ha optado de nuevo por encargar nuevos informes concretos sobre determinadas empresas públicas, como Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (a Improven, la consultora de Eduardo Navarro), donde se pueden abrir nuevas vías a la externalización de servicios o incluso de explotación de líneas de metro y tranvía, o en el Instituto Valenciano de la Vivienda, donde de nuevo PwC fue la encargada de diseñar el plan de viabilidad (o de no viabilidad, de hecho) cuya medida más visible fue el ERE, pero que, y de nuevo es una estrategia política, también recomendó que se abandonaran líneas de negocio históricas, como la promoción inmobiliaria de vivienda protegida, y se pusieran a la venta los activos de suelo.
LOS DOS INFORMES DE RTVV: PWC Y GARRIGUES
Otro caso en el que la Generalitat ha optado por escuchar a consultoras privadas para tomar la decisión final es el de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV). Aunque en la actualidad quien está trabajando en el ERE que afectará a buena parte de la plantilla es el bufete Garrigues, RTVV cuenta con un informe previo de PwC cuyas conclusiones no se conocen, ya que no se ha mostrado ni al consejo de administración.
El Consell ha iniciado los trámites parlamentarios para aprobar la nueva Ley de Ràdio Televisió Valenciana. De hecho, y con carácter excepcional, se alargará el periodo de sesiones para poder aprobarla antes de las vacaciones parlamentarias de verano.
Una vez más, la mano de las consultoras se intuye de en una ley que opta por liquidar las actuales empresas que forman RTVV y crear unas nuevas. La complejidad, además, del modelo elegido, que permitirá la privatización de todo aquello que no sea considerado estrictamente servicio público, desvela un asesoramiento legal de primera línea.
EL FUTURO DE LA SGR, EN MANOS DE KPMG
El Consell también ha echado mano de una consultora, en este caso KPMG, para que revise de nuevo todas las cuentas de la Sociedad de Garantía Recíproca de la Comunitat Valenciana. La sociedad avalista, con graves problemas de capital, ha estado a un paso de la intervención por parte del Banco de España. La inyección de liquidez que le hizo la Generalitat le permitió salvar el match ball, pero todo apunta, como explicó este periódico, a que igual no es suficiente. La nueva auditoría externa de KPMG será decisiva para su continuidad.
DOS NOMBRAMIENTOS DE BUCH PROCEDENTES DE LA CONSULTORÍA
El recurso a las consultoras no es la única muestra de la llegada de técnicos al Consell. Desde que Máximo Buch es conseller de Economía ha hecho dos nombramientos y en ambos casos ha echado mano de consultores, un territorio que conoce bien. Así, para sustituir a Jorge Vela en el Instituto Valenciano de Finanas (IVF), optó por Fernando Díaz Requena, director del área de finanzas corporativa de Improven. Y para dirigir el sector público empresarial el elegido has sido Rafael Sánchez Pellejero, un auditor procedente de Deloitte.
"Va a haber más casos en los que el Consell tenga que recurrir a las consultoras especializadas, ya que queda mucho trabajo por hacer si quieren reducir el déficit, y algunas instituciones, como la universidad, necesitarán informes detallados", explican desde el sector, apuntando a futuros terrenos de reforma..
És una vergonya. Directament per a què votar no? Que governen estes consultores que fan i desfan pensant en els seus interessos i no en els dels valencians. Així després estos altas càrrecs escurrirán el bulto, Quina vergonya!
Pues que renuncien a su sueldo los tecnicos y altos cargos de la Generalitat
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