GRUPO PLAZA

un libro repasa LA FILMOGRAFÍA DEL realizador americano

Pau Gómez: "Clint Eastwood no tiene herederos, es triste no poder ver su influencia como director"

18/08/2018 - 

ALICANTE. “No quiero necesitarte porque no puedo tenerte”, decía Robert Kincaid, Clint Eastwood, en la extraordinaria Los puentes de Madison. En la pantalla Clint y Meryl Streep, Eastwood sin pistola, sin poncho y sin frases ingeniosas antes de matar a balazos a cualquier pobre desgraciado. Clint Eastwood siempre ha estado ligado en el imaginario colectivo a ese hombre rudo y malcarado, siempre visto a través de su faceta como actor, en la que ha destacado con sencillez, per omuchos se olvidan de su trabajo, critico y audaz, en la dirección. Me reúno con Pau Gómez para charlar sobre su libro Clint Eastwood. El mito tras la máscara y comentar cómo ha hecho justicia con el bueno de Eastwood, uno de los último grandes del cine.

“Me llama la atención – comenta Pau – el Eastwood director, porque hay muchísimo escrito sobre su faceta como actor, y a mi me llama la atención que estamos ante uno de los maestros, o de los últimos maestros del cine americano, y no había ni un solo libro que se centrara en su trayectoria como director. Lo cual no obvia su trayectoria como actor porque a mi entender sus mejores interpretaciones siempre han sido en películas dirigidas por él mismo. Con lo cual también era una manera de explorar su faceta interpretativa. Eastwood es un director con una filmografía riquísima y muy personal, hay temas fundamentales en su cine,desde la venganza hasta el antihéroe redimido, valía la pena explorarlo como cineasta, realmente él va a pasar a la historia como cineasta, porque como actor ha sido una estrella, pero no ha sido un actor excelso, como director sí”. 

Pau Gómez es un amante del cine, lo mismo dirige el Festival Antonio Ferrandis de Paterna, como se sumerge en las filmografías de directores de la talla de Zemeckis (Regreso al futuro, 1985) como de Nolan (Origen, 2010). Además, para sus libros siempre recoge impresiones de personas que puedan a portar algo más al texto, en esta ocasión escogió a John Carlin para el prólogo, autor de El factor humano, libro en el que se inspira la película Invictus (2009). “John Carlin era la opción obvia – recuerda Gómez – , en aquel momento trabajaba en España, además es un tipo muy cordial y cercano, y habla perfectamente castellano. Yo lo conocía porque en Canal 9 le hicimos un par de entrevistas por una biografía de Rafa Nadal (Rafa, mi historia) que escribió y por la muerte de Nelson Mandela. Conservaba su número y correo electrónico, y fue una cosa absolutamente fugaz, era mi primera opción, le escribí por la mañana y me contestó por la tarde encantando,diciendo que era un honor". "Lo único que le pedí en el prólogo que hiciera un relato del Clint Eastwood que nadie conocía durante el rodaje de Invictus(2009), y a la mañana siguiente tenía el prólogo en mi correo. Es un privilegio que aceptara sin leerlo, porque en aquel momento el libro estaba en una primera fase muy embrionaria”, señala.

Aproximarse al Eastwood director es interesante por su formación autodidacta, su evolución como autor y su desmarque de la imagen que había creado, Eastwood es un tipo que ha tenido muchas influencias –comenta el escritor – , y es un batiburrillo de grandes maestros, y al final lo ha convertido en un discurso muy personal, y muy identificable, pero no veo que haya dejado una gran influencia en el cine. Él es un caso atípico, porque lo primero que dirige es un largometraje, debe ser el único director en la historia del cine que no ha rodado un mísero corto, ni un trabajo experimental para la facultad, ni un anuncio antes de ponerse detrás de la cámara. El tío lo primero que dirige es Escalofrío en la noche (1971), y además lo hace de manera bastante solvente, no ha estudiado cine, no tiene ni idea, y la noche antes de rodar tiene un ataque de pánico". "Ha tenido maestros muy importantes desde Sergio Leone (Por un puñado de dólares, 1964hasta Don Siegel (Harry el sucio, 1971), que son sus dos grandes referentes, su cine al principio bebe mucho del cine de Leone y Siegel. Nunca ha ocultado sus influencias, y luego las ha hecho suyas. Es un tipo que rueda de una manera muy natural, muy intuitiva, pocas tomas, él tiene claro que la primera toma de un actor es la mejor porque es la más natural. En el cine de hoy en día, donde predomina el blockbuster, donde las películas taquilleras recauda más que el año anterior, la esencia de un cine tan íntimo, tan puro como el de Eastwood, se está perdiendo. No hay un heredero de Eastwood, es muy triste que no podamos ver su influencia

Entre todas las película del longevo director, Pau selecciona una para comenzar a entender algo más que su creación artística, sino también su valor para desvincularse de parámetros donde su rol funcionaba a la perfección, elijo una que las nuevas generaciones deberían descubrir cuanto antes, Los puentes de Madison (1995), – explica el autor – que siempre me ha parecido una de las grandes obras maestras de Eastwood, que parte de una novela terrible, malísima, novela rosa mal escrita y nada recomendable. Él la convierte en una historia de amor muy creíble entre dos personas que chocan de repente, que están de vuelta de todo, y que te llega de una manera espectacular. Eastwood al principio era el tipo duro de Hollywood, y cuando comenzó a dirigir, dirigía películas de acción o westerns. Cuando tiene un Oscar, y ha hecho películas tan maravillosas como Sin perdón (1992), Bird  (1988) o Un mundo perfecto(1993), se descuelga con una historia de amor entre un hombre y una mujer y es una sorpresa. Es una demostración de que es un hombre que no se ciñe a ningún género, ni ningún patrón determinado, y que siempre le gusta experimentar”. 

Si existe un director que ha sabido ganarse un hueco y el respeto en el cine norteamericano, cuando era probable que aquello pareciera más bien una burla oel capricho de una estrella, ese era Clint“como director tuvo su lucha contra el tipo que él mismo había creado como actor – recuerda Pau – contra ese tipo duro, contra ese policía o pistolero. Al principio le costó,por eso sus primera películas no son nada experimentales ni arriesgadas, donde él es el protagonista y donde tiene su propio vehículo para conectar con el gran público, pese a ello hace películas muy reivindicables como Fuera de la Ley (1976).

Eastwood ha marcado una época en el cine mundial, sus películas han sabido acariciar los sentimientos en muchas ocasiones y en otras divertirnos a rabiar, era necesario un libro que nos situara en cada momento para entender el camino de la evolución que ha sufrido, como cualquier director, Clint Eastwood, pero ¿qué nos tiene cociéndose Pau en forma de libro? “Estoy con un proyecto sobre Denis Villeneuve (Blade Runner 2049, 2017) que me apasiona, me parece uno de los grandes directores de esta era junto a Christopher Nolan (El caballero oscuro, 2008), son los máximos exponentes del cine espectáculo de autor, que hacía Spielberg y prácticamente nadie mas. Tiene un discurso muy personal, creo que es capaz de hacer grandes obras de diferentes géneros, absolutamente entretenidas y con un reflexión y una gran capacidad de hacer pensar al espectador. Y además, tiene ese sentido del espectáculo”, sentencia Pau. Si de algo nos sirve el presente libro, es para ser nuestra guía a través de a filmografía de Eastwood, prestando atención a los pequeños detalles- éste libro no solo nos abre los ojos, sino también nos descubre a un creador más allá de la “trilogía del dólar”.

next

Conecta con nosotros

Valencia Plaza, desde cualquier medio

Suscríbete al boletín VP

Todos los días a primera hora en tu email


Quiero suscribirme

Acceso accionistas

 


Accionistas