Festival de Yoga en Canet. Foto: Ajuntament de Canet d'en BerenguerVALÈNCIA. Canet d’en Berenguer ya forma parte de la Red Española de Ciudades Saludables (RECS), el primer municipio de la comarca del Camp de Morvedre. Una agrupación de localidades que, dentro de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) se han unido en el compromiso de cumplir con el programa "Ciudades Saludables (Healthy Cities)" de la Organización Mundial de la Salud.
La adhesión a esta red implica el desarrollo de iniciativas en materia de salud pública y el fomento de programas de promoción de esta, así como la prevención de enfermedades, acciones que deben poner en marcha los gobiernos locales y administraciones. En este caso, el Ayuntamiento de Canet lleva cuatro años trabajando en esta dirección en el proyecto #Canetsostenible.
El alcalde de Canet, Pere Antoni, reconocía que formar parte de esta red ha sido una de las prioridades a la hora de diseñar un nuevo modelo de municipio. "La sostenibilidad, la accesibilidad y la salud de las personas, vecinos y vecinas ha sido el eje de toda nuestra política. Y es que, una ciudad saludable es aquella cuyo gobierno prioriza la salud en el día a día de la gestión pública y en ese camino estamos, trabajando por y para las personas, en definitiva, por su bienestar", declaraba el alcalde.
Precisamente, uno de los objetivos de las ciudades saludables es el empoderamiento de la ciudadanía, tal y como recoge la OMS, para lo que es necesario el fomento de políticas públicas que contribuyan a mejorar la salud de toda la población con equidad y efectividad.
Según la Organización Mundial de la Salud, formar parte de la red implica que las instituciones y los servicios públicos a nivel local han de gestionar y responder a problemas actuales como el envejecimiento de la población, el cambio climático, los desafíos medioambientales, las desigualdades sociales, los retos económicos y políticos, la migración y el urbanismo, las enfermedades no transmisibles y las amenazas a la salud, objetivos que se recogen en la Fase VII (2019-25).
Entre los compromisos que deben adquirir las ciudades o municipios que formen parte de la red destacan el fomento de la colaboración y la acción conjunta de las ciudades participantes en materia de promoción y protección de la salud, además de asegurar la intercomunicación y el intercambio de experiencias. Establecer criterios de evaluación e indicadores unificados que permitan evaluar las actuaciones de la promoción y protección de la salud y la acreditación de la calidad de su ejecución. Mantener contactos con otros proyectos de ciudades saludables en nuestro país, en otros países y con las redes nacionales, así como con la Red Europea.
