Foto: RAFA GASSÓVALÈNCIA. La marca valenciana de joyería Singularu, fundada por Paco Tormo y Cristina Aristoy, prepara la apertura de una nueva tienda en el centro comercial Aqua de València. Tras consolidar la venta online, será su segunda tienda física después de abrir en el mes de noviembre en Conde Salvatierra 33.
En marcha desde hace tres años, la startup valenciana ha pisado el acelerador en el último año tanto en facturación como en hitos a cumplir. "La apertura de nuestra primera tienda fue muy bien, es rentable y en poco tiempo hemos recuperado los costes de la apertura", explica Tormo, CEO de la compañía. "Todo el marketing online que hacemos se traduce en venta en la tienda".
Singularu -bajo la dirección de la cofundadora Cristina Aristoy- diseña joyas de tendencia que fabrican en España y venden a un precio asequible, muchas de ellas personalizables, con una gran rotación de catálogo que además ha tenido gran penetración en el mundo blogger.
Entre sus clientes físicos, muchos que les seguían online pero que todavía no se habían decidido a realizar una transacción. "Aunque el ecommerce genere volúmenes grandes no deja de ser minoritario respecto al retail", reconoce Tormo. De hecho, su apuesta por la presencia física les ha llevado a desarrollar un modelo de franquicia de Singularu junto a MundoFranquicia. "El objetivo es que emprendedores como nosotros que buscan una oportunidad puedan iniciar un negocio".
"2018 va a ser el año del offline", asegura. Tienen previsto abrir en Madrid, pero su intención es terminar el año con un total de seis puntos de venta, aunque todavía no saben cuántas serán propias y cuántas franquiciadas. "Queremos probar todo y entender todos los modelos posibles para mejorar lo existente", señala. Sus cifras van disparadas, y es que en 2017 cerraron con dos millones de facturación y su objetivo para 2018 es el de llegar a los 3,5 millones.
La compañía, que ya suma 16 trabajadores, abrirá próximamente una tienda en dólares para vender al resto del mundo ampliando su internacionalización, aunque ya vende en euros en países de Europa como Francia o Italia. De hecho, esta semana todo son buenas noticias para Singularu, y es que recibieron el premio a la mejor startup fashion en los Valencia Startup Awards.
Nacida en Demium Startups y acelerada en Conector y Lanzadera, la compañía cerró una ronda de inversión en 2016, liderada por Zriser, el family office de Pablo y Ana Serratosa, y próximamente abrirá una nueva ronda de financiación para que entren nuevos inversores.
Las joyas de la marca aterrizan por primera vez en las capitales de Asturias y el País Vasco.
