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VALENCIA. El Gobierno central tendrá una partida presupuestaria en 2016 para poner en marcha obras de modernización de regadíos tradicionales del Júcar pendientes desde hace una década. El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, anunció este viernes que el Grupo Popular en el Congreso de los Diputados presentará una enmienda al proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) con medidas para "paliar la situación de sequía por un importe de 20 millones de euros", entre ellas, varias partidas extraordinarias "para ejecutar obras que benefician a los regantes del Júcar".
Concretamente, la enmienda incluye la primera fase de la balsa de suministro en alta de la Acequia Real de Escalona y la primera fase de la red de transporte de los sectores 18 y 19 de Algemesí. Además, se acometerán obras de mejora en el Acuífero de la Mancha Oriental, en el valle de Guadalentín y en otras instalaciones del Júcar a su paso por Castilla-La Mancha.
El desglose del presupuesto de cada una de estas obras no está especificado en la enmienda y será determinado por la empresa pública estatal Acuamed, encargada de ejecutarlas. Los 20 millones se financiarán "con cargo a remanentes" de esta empresa.
Las obras en la parte valenciana del Júcar estaban previstas desde 2001, cuando la Unidad Sindical de Usuarios de Júcar (USUJ), formada por 50.000 regantes e Iberdrola, llegó a un acuerdo con el Gobierno de José María Aznar por el que cedía al Estado el embalse de Alarcón (Cuenca), que había costeado, a cambio de inversiones en mejoras de sus regadíos que debían construirse en un plazo máximo de cinco años.
Los sucesivos gobiernos centrales han ejecutado algunas obras pero la USUJ se ha quejado año tras año de que se hacía con cuentagotas, incumpliendo de largo el calendario. La última promesa les llegó con la aprobación del Plan de Cuenca del Júcar, al que los regantes valencianos aceptaron no oponerse -se abstuvieron- a cambio de que se ejecutasen las infraestructuras pendientes por importe de 50 millones. Sin embargo, en el proyecto de presupuestos de 2016 el Gobierno volvió a olvidarse del compromiso.
La enmienda popular corrige en parte ese olvido. Moragues anunció una segunda enmienda del Ministerio de Agricultura que beneficia a la Comunitat Valenciana, concretamente a Alicante. Se trata de una modificación por importe de 2,8 millones de euros para aumentar el presupuesto de gastos corrientes de la Confederación Hidrográfica del Segura con los que afrontar los costes fijos del Trasvase Tajo-Segura referidos a costes de explotación y de potencia de las elevaciones de agua.
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